Casi es un hábito en noches de luna despertar de madrugada con el descanso ya acontecido en el cuerpo. Y así me quedo escuchando el ulular de la lechuza expandiéndose en el silencio nocturno.
Con los primeros rayos de luz del día una bandada de pájaros da comienzo un concierto cerca de la ventana. Los pasos de los peregrinos madrugadoreps se funden con el trino alocado de estos animados pájaros. El crujir de una puerta revela que en el albergue han comenzado a despertar y el aroma del café se filtra por las rendijas del suelo de madera.
~
Me lo encontré en el Welcome aún con la mochila al hombro. Mientras, en el comedor un grupo de peregrinos italianos celebran su descanso con algarabía y una partida de Jenga. Carmen, una peregrina suiza me presenta a Peter, un peregrino alemán que nació en el cuarenta y seis. Me choca la mano y se abraza a la invitación del descanso. En el mismo instante avisan por pinganillo de la pérdida de una persona querida y la tristeza comienza a habitar el cuerpo junto a la alegría de contemplar la vida multicultural en el albergue. Uno de los peregrinos lituanos nos invita a visitar su camping de caravanas con la floki. En la cena comunitaria de quince, Peter comparte retazos de sus caminos. Este es el número cuarenta y cinco. Y es su primera vez en el beso. Elogia la comida con palabras dulces y tras el postre sonríe a todos con gran satisfacción diciendo, Este lugar transmite una energía muy especial. Todos brindamos en siete idiomas. Antes de ir a dormir susurra en mi oído, permite que la alegría y la tristeza que impregnan ahora tu corazón convivan amigablemente, no te aferres a ninguna de ellas. Acerca su mano a mi mano y deja algo en su interior. Mientras cierra mi mano me dice, demuestra que estás decidida a lograrlo.
~
Un collar de hilo blanco con una pequeña viera de color plateado se ha incorporado al altar. Allí donde todo convive en paz y armonia. Aprovecho el momento cósmico para sembrar nuevas intenciones y atravesar con fe este portal hacia una mayor consciencia. Tiempo de ir hacia dentro. Tiempo de Atención plena para dar luz a lo que quiero que emerja. Tiempo para soltar lo que me limita. Tiempo para renacer.